
Suena la campana y la final de la Copa de Plata Terralpa llega a su fin. Unos festejan y otros acep- tan, deportiva y elegantemente, la derrota. Pero ahí no acaba el polo. Queda tiempo para el último Chukker (Last Chukker). La zona de ocio de Ayala Los Pinos que se ha consolidado como el lugar de encuentro y en el que, tras los partidos, se convierte en un hervidero de gente de todas las edades.
El sábado 12 la multitud que, previamente había estado en las gradas, se trasladó a la zona de co- pas y restauración, espectacular la variedad de comida en los Food Trucks, para asistir al concierto que ofrecieron Third Floor, Jack Truck Rail y Juan Peña. De todo y para todos. Ahí radica el éxito de este verano.
Sin duda, un acierto de la organización y en el que el ahora denominado tardeo -aunque se prolonga hasta la noche- se ha hecho hueco en las tardes de Ayala Polo Club.
La actividad, además, no cesa y ahora con la disputa de la Copa de Oro Electrolit tampoco faltarán jornadas especiales aunque cada día es diferente en Last
Chukker. El 17 de agosto tendrá lugar una White Party, en la siguiente jornada será el turno de Picoco ́s Band, el 26, coincidiendo con la final la gran fiesta Electrolit y el domingo, como fin de temporada, Siempre Así.
Variedad, buen gusto, calidad en el servicio y los productos para que el último chukker se deguste fuera de las tablas.